Add parallel Print Page Options

La tristeza de los judíos

[1] Cuando Mardoqueo se enteró de lo que había pasado, rompió su ropa en señal de tristeza, y se puso ropa áspera. Luego se echó ceniza en la cabeza, y anduvo por la ciudad llorando amargamente y en voz alta. [2] Llegó hasta la entrada del palacio del rey, pero no entró porque estaba prohibido entrar al palacio vestido de esa manera.

Read full chapter